Marta y yo nos conocemos desde nuestra época de estudiantes. Fue hace ya más de un año cuando me habló de su proyecto personal-profesional como motivadora emocional. Me pareció una estupenda idea, y más aún cuando la veía tan ilusionada y segura con esta aventura.
Curiosamente la manera en que conocí sus sesiones partió de mi necesidad de mejorar y practicar inglés para mi carrera profesional (…y en cuál no). Me explico: aprovechando que teníamos conversaciones en inglés, Marta me propuso hacer una sesión de coaching en inglés, para ver cómo me planteaba mi día a día en mi “trabajo” que era buscar trabajo (como otros millones de españoles actualmente).
Al principio me daba algo de reparo, ya que a nadie le gusta que le recuerden lo que tiene que hacer, y menos aún cuando sabe que es verdad y que no lo está poniendo en práctica. Llamadlo dejadez, pereza, hastío… pero siempre viene bien, y así me ocurrió. Planificamos juntos ciertas pautas que pudieran parecer muy obvias, partiendo del análisis del porqué y sobre todo el “para qué” de llevarlas a cabo.
Aunque fue sólo una sesión, ya que encontré trabajo en 3 semanas, me resultó muy beneficioso que me recordaran la importancia de cosas como el ser perseverante, y marcarte una rutina y horario, más aun cuando no tienes ninguna obligación “impuesta” de cumplirlos, y estando en una situación, como es el paro, en la que es fácil caer en la inactividad y pérdida de tiempo.
En el año y medio que he estado desempleado: no madrugaba, y como consecuencia de ello trasnochaba, y así sucesivamente, empleaba mis horas en cosas que no me llevaban a ninguna parte, o por lo menos al que es el objetivo de toda persona desempleada. Fruto de todo esto, hizo que en varias ocasiones me sintiera enormemente desanimado por mi dejadez, y poca diligencia, como entendí después en la sesión con Marta.
No me quiero extenderme mucho más, pero sí animar a cualquiera en mi misma situación o en cualquier otra parecida, a recurrir a una persona vitalista, inteligente, con ambiciones y capacidad de empatizar con la persona que tiene enfrente. Espero que sirva para que otros lleguen a conseguir aquello que no pueden, o creen que no pueden alcanzar.
Muchas gracias Marta.