Contraté a Marta para organizar una casa que estaba intentando alquilar sin mucho éxito. Con gran rapidez y una actitud estupenda, empezó a analizar lo que era aprovechable, quitar del medio cosas inservibles, separar lo de tirar y lo de dar y rehacer todo lo que sí era útil. Lo que estorbaba al paso lo colocó de manera que no molestase tampoco a la vista, e incluso cambió muebles de sitio para armonizar el conjunto de cada estancia. El resultado fue maravilloso. Las habitaciones quedaron muy espaciosas. Da mucha paz y tranquilidad entrar ahora en la casa. Esto me ayudó a sentirme más segura a la hora de enseñarla a los futuros inquilinos. Y lo mejor de todo es que el primero que vino a visitarla después de su organización quedó tan encantado, ¡que ya la tengo alquilada!