Me gusta entender la Navidad y el final del año como el momento ideal para renacer... dejar atrás el pasado y enfocarme en el presente para crear un futuro mejor.

Si a ti te pasa lo mismo, y quieres lograr tu verdadero renacer, es importante y prioritario que inviertas tu energía, tiempo y dinero en ti mism@, tanto en tu autoconocimiento como en tu disfrute. Y es que, por si aún te quedan dudas, te lo mereces, porque ERES INFINITAMENTE VALIOS@. Sigue leyendo que te explico el porqué:

Reconoce tu infinito valor a través del trato que te das, el que aceptas y el que ofreces

Seguro que conoces a alguien, o bien en persona o través de medios de comunicación o RRSS a quien admiras por ser un signo de esperanza que con su ejemplo ilumina el mundo y te recuerda que tod@s somos uno, y por lo tanto que la valía de tod@s es la misma sin excepción.

Nuestro valor infinito se debe a nuestra condición divina como parte fundamental del universo. Por tanto, no estamos condenados a ser esclavos de una vida sin sentido, sino herederos de la maravilla de vivir nuestro propósito, que es ponernos al servicio de la verdad, que se encuentra en nuestro corazón, en el que podemos encontrar respuesta a todas nuestras dudas

Reconociendo nuestra divinidad y disfrutando de todo cuanto la naturaleza ha puesto a nuestra disposición, con absoluta conciencia y conexión con el abundante universo del que formamos parte, estamos sirviendo a la verdad y por lo tanto conseguimos ser un signo de esperanza

Reconocer nuestra divinidad es reconocer nuestro infinito valor y el respeto que merecemos, y por lo tanto vivir con la dignidad que nos corresponde. Es decir, trasmutar la baja autoestima y mal autoconcepto, y no permitir que nadie nos pisotee, maltrate, desprecie, excluya o ejerza cualquier tipo de violencia más o menos sutil contra nosotr@s. Y coherentemente, tenemos la responsabilidad de tratar a los demás con el respeto y dignidad que merecen para ayudarles a reconocer su infinito valor a través de nuestro trato, pues es el signo de esperanza de tod@s anhelamos y que podemos darnos a través de las relaciones interpersonales.

De bien nacid@s es ser agradecid@s

Como parte de un universo abundante, que conoce y sabe lo que necesitamos y se nos concede sin pedirlo, nos corresponde simplemente agradecer todo el tiempo

Y como seres infinitamente valiosos, no perdemos dicho valor por cometer errores, sino que somos invitados a corregirlos a través de múltiples oportunidades.

Por eso no logramos ser felices cuando nos pasamos el día entero hablando de lo que nos falta y pidiendo, porque al poner el foco en la carencia no podemos atraer nada diferente. Debemos redirigir nuestra mirada hacia el ser de infinito valor que somos como parte de la divinidad que nos provee de todo lo que necesitamos en cada momento. Pues la única petición que tiene sentido es aquella que hacemos como intercesores, pidiendo para otros, que es algo muy distinto a mendigar para uno mismo.

Dejemos de culpar al universo de ponernos pruebas, porque ni es probado por el mal ni pone a prueba a nadie... pues nos conoce y sabe lo que necesitamos y lo que nos cuesta... no se lleva nada ni a nadie, sino que nos da, acoge y recibe a tod@s... no causa dolor, sino que nos ayuda a saltar cada obstáculo y le da sentido a nuestra vida.

La esperanza es clave para superar cada reto, y yo estoy a tu lado

Concretamente mi vida se llena de sentido con cada client@ en el que crece la esperanza al tratarle como la persona infinitamente valiosa que es... y al ayudarle a ver la manera de superar y convertir en oportunidad de crecimiento cualquier reto vital que esté atravesando. Y tanta más esperanza trato de infundir con cada avance que hago yo misma en mi propio proceso de autodescubrimiento y disfrute, al compartirlo cada semana a través de este BLOG, así como con cada uno de los tres SERVICIOS de ORDEN que te invito a regalar-te esta Navidad: el Manual de Orden y Vida, el CURSO básico de Orden y la Consultoría Integral de Vida.

Sé tu también un signo de esperanza para los que te rodean, tratándote como la persona infinitamente valiosa que eres, y tratando a los demás también así al contagiarles del orden, la paz y la armonía que estás a punto de aprender a crear y mantener en todas las áreas de tu vida 😊

Fuente de inspiración: Pacho Bermeo